The day after tomorrow

El día después de mañana

Hace algunos años el hombre comenzó a tomar conciencia del daño que sus actividades cotidianas y su industrialización le conferían al medio ambiente. Es cierto que existe un dicho que cita “mejor tarde que nunca”, mas en materia meteorológica, el haberse percatado tardíamente de los cambios climáticos implicó el deterioro de la capa de ozono, la alteración de los ciclos biológicos de plantas y animales, modificaciones en el clima de las regiones, perjuicios en la salud humana, etc. Fue así que algunos investigadores elaboraron modelos y esquemas que intentaron pronosticar el comportamiento climático para un futuro.

Los cineastas no se quedaron atrás y así mismo filmaron películas referentes al tema, basadas tanto en ficción como en datos científicos. Una de las más recientes es “El día después de mañana” que narra las consecuencias del calentamiento global y las alteraciones climáticas que éste conlleva.

Dicho calentamiento es producto del efecto invernadero (concentración del calor en altas proporciones), originado a su vez por la emisión excesiva de gases tóxicos, CO2, combustión del petróleo, entre otros, trayendo como consecuencia el derretimiento de los polos y por ende la entrada de grandes cantidades de agua dulce a los océanos, tal cual sucede en la película. La entrada de agua dulce desaliniza los océanos y modifica las corrientes marinas (movimientos de traslación, continuados y permanentes de masas de agua determinada de los océanos y, en menor grado, de los mares más extensos) que generalmente se forman por la diferencia de densidad del agua, que es mayor cuanto más fría y/o salada sea, tendiendo a hundirse para dar lugar a una circulación termohalina, eventualmente este flujo se cerrará y el clima cálido disminuirá dramáticamente. Es por ello que el cambio climático está estrechamente relacionado con las corrientes, si éstas son alteradas también son modificados los climas de las costas que bañan, pues ejercen una influencia notable:

Clima seco en las costas occidentales de la zona intertropical o subtropical que están bañadas por corrientes frías debido al ascenso de aguas muy profundas, y clima más cálido y húmedo en las costas occidentales de los continentes en las latitudes medias y altas, debido a la enorme cantidad de energía que transportan desde la zona intertropical. A grandes rasgos, las direcciones de las corrientes oceánicas coinciden con las de los vientos planetarios por los mismos motivos que estos (Wikipedia. Corriente Marina. http://es.wikipedia.org).

Otras consecuencias producto del cambio climático las constituyen: el aumento del nivel del mar, sequías, inundaciones, huracanes y en general fenómenos meteorológicos más recurrentes y más severos.

Ahora bien, en la película el desastre ocurre aceleradamente en 7 días, así como los huracanes y el congelamiento del hemisferio norte; sin embargo, no se ha comprobado científicamente que el cambio climático pueda suceder con tal rapidez. Otros aspectos netamente ficticios son los huracanes (en la películas se dan sobre tierra) y las fotos que proyectan de los mismo, pues lo que se aprecia es la imagen invertida o vista desde abajo.

Por otro lado, las lluvias de granizo, las tormentas eléctricas, el fuerte oleaje, los ciclones, vientos a grandes velocidades, etc., son fenómenos que se dan unos más frecuentemente que otros y que a la hora de estallar el clima, pueden acrecentar su furia considerablemente. Un detalle interesante, es el comportamiento de los animales al acercarse la catástrofe, las aves emigran al sur, los osos y demás mamíferos se desesperan, etc., cierto es que ellos perciben los cambios de la naturaleza antes que el ser humano gracias a sus instintos altamente desarrollados. Dentro de todo el film conserva su base científica.

Por último, el cambio climático se ve afectado principalmente por:

Variaciones solares: la temperatura media de la Tierra depende, en gran medida, del flujo de radiación solar que recibe, esta es desigual debido a la forma del planeta, su eje de inclinación y la posición en la órbita con respecto al sol.

Variaciones orbitales: la órbita oscila periódicamente, haciendo que la cantidad media de radiación que recibe cada hemisferio fluctúe a lo largo del tiempo, provocando además las pulsaciones glaciares a modo de veranos e inviernos de largos períodos en los polos.

Acción antropogénica: Actualmente tanto las emisiones de gases como la deforestación, causadas por el hombre, se han incrementado hasta tal nivel que parece difícil que se reduzcan a corto y medio plazo, por las implicaciones técnicas y económicas de las actividades involucradas.

Composición de la atmósfera: equilibrio entre lo que se emite y lo que se absorbe. En ella se desarrollan los fenómenos climáticos (viento, lluvia, niebla…), retiene los rayos UV del sol y aporta CO2 y oxígenos para los procesos vitales de los seres vivos.

Corrientes marinas: actúan como moderadoras, suavizando temperaturas o calentándolas, dependiendo de la zona a la cual se dirijan.

El campo magnético del planeta: las variaciones en el campo magnético terrestre pueden afectarlo de manera indirecta ya que, según su estado, detiene o no las partículas emitidas por el Sol.